En una entrevista reciente en InfoPico Radio 99.9, Juan Pablo “Coco” Vieta abordó un tema de creciente relevancia: la educación financiera y la cultura del ahorro. En un contexto donde esta materia no se enseña en los colegios, Vieta destacó la importancia de comprender y practicar la gestión financiera desde una edad temprana.
La cultura del ahorro y el sacrificio
Vieta comenzó enfatizando que el ahorro siempre implica un sacrificio. “Cubiertas las necesidades más elementales, lo que muchos de nosotros no queremos entender es que siempre el ahorro es un sacrificio”, afirmó. Esto se debe a que ahorrar significa postergar un consumo presente para satisfacer una necesidad futura, lo que puede generar tensiones en la dinámica familiar.
La clave del ahorro: diferir el consumo
El concepto de ahorro, según Vieta, es esencial para el desarrollo económico, ya que está intrínsecamente relacionado con la inversión. “El ahorro de una persona que hace una colocación a plazo fijo significa el crédito que financia la inversión de una pequeña y mediana empresa”, explicó. Sin embargo, la poca cultura del ahorro en Argentina está ligada a una histórica inestabilidad económica y una baja capacidad de ahorro en la población.
La disciplina del ahorro
“El primer objetivo de cualquier persona o familia en materia de administración y percepción de ingresos familiares es garantizar la cobertura de las necesidades elementales”, indicó. Después de cubrir estos gastos, se puede comenzar a ahorrar. Vieta mencionó que una buena práctica puede ser ahorrar entre el 25% y el 35% de los ingresos, aunque reconoció que no todos tienen la capacidad de hacerlo y que se puede empezar desde mucho menos.
Ahorro e inversión: dos caras de la misma moneda
La entrevista también abordó la relación entre ahorro e inversión. Vieta explicó que invertir en instrumentos financieros puede ser una manera efectiva de hacer crecer los ahorros, aunque esto depende de la tolerancia al riesgo de cada persona. “Invertir en renta fija o variable no es para alguien que tenga baja tolerancia al riesgo”, aclaró, sugiriendo que las personas con mayor aversión al riesgo deberían optar por opciones más seguras como los plazos fijos.
El ahorro forzoso: una alternativa
Para aquellos que tienen dificultades para ahorrar de manera disciplinada, Vieta mencionó la opción de financiar consumos importantes a través de créditos. “Si una persona quiere comprar un auto, puede generar el compromiso de ahorrar forzosamente el monto de la cuota y tener el coche hoy”, explicó. Esta estrategia puede ayudar a las personas a realizar consumos importantes sin descuidar la necesidad de ahorrar.
El debate del ahorro en la familia
Vieta compartió experiencias personales sobre cómo manejar las finanzas en el hogar, señalando que la cultura del ahorro puede generar debates y tensiones dentro de la familia. Sin embargo, enfatizó la importancia de tener una visión a largo plazo y de inculcar hábitos de ahorro a las nuevas generaciones.
