El grooming y las apuestas clandestinas fueron los temas centrales que funcionarios judiciales, entre ellos el presidente del Superior Tribunal de Justicia, José Roberto Sappa, brindaron ante un centenar de alumnos/as de General Pico.
La actividad se enmarcó en el programa del STJ, “Educación + Justicia”, a partir del estand que el Juzgado de Paz de General Pico tiene en la muestra del campo. Por ello estudiantes de segundo y tercer año del Centro Educativo Los Caldenes y de cuarto y sexto año del Instituto Nuestra Señora concurrieron al auditorio del predio.
Junto a Sappa estuvieron el fiscal general Armando Agüero, las fiscalas Andreína Montes y Pía Collazo y, como organizadora, la jueza de Paz, Claudia Godoy.
Sappa, en un tono coloquial, les preguntó a los adolescentes qué imaginaban de la Justicia y surgieron un par de respuestas. “Que defiende a la gente”, expresó una alumna. “Que sanciona cuando no se respetan las leyes”, acotó otra.
“La vida cotidiana no es solo portarse bien o mal, sino también relacionarse con otras personas. En ese contexto, la Justicia actúa cuando dos personas por sí solas no pueden solucionar un problema”, explicó el presidente del STJ.
Y acotó: “La esencia del Poder Judicial es intervenir frente a ese tipo de situaciones. Es como si vos comprás un celular y no funciona. ¿Qué querrías, que te devuelvan la plata o que te den otro? (un estudiante le respondió que le reintegren el dinero). Entonces si vos querés la plata y quien lo vendió te ofrece otro celular, alguien tiene que resolver ese problema”.
A su turno, Agüero advirtió a los estudiantes sobre las apuestas ilegales, una modalidad que viene en crecimiento en las escuelas. El fiscal general propuso tener “una visión más estricta del uso de los celulares en las aulas”.
Al proponerle al auditorio hablar del tema, un alumno contó que él apuesta en su barrio cuando se organizan partidos de fútbol. Agüero, si bien remarcó que los menores de 16 años no tienen responsabilidades penales, pidió usar la tecnología “con mayor disciplina” y les aconsejó que “no se dediquen a tomar dinero para apuestas”.
Finalmente, Montes y Collazo hablaron de grooming, una conducta que está sancionada en el Código Penal, y que refiere a cuando un adulto se contacta con un menor de edad, a través de medios electrónicos (redes sociales), con el propósito de cometer un delito contra la integridad sexual.
Frente a ese tema, un estudiante detalló una experiencia que había vivido, por la cual mientras estaba en una plataforma de videojuegos on line, apareció una persona solicitándole fotos íntimas.
“¿Ustedes buscan tener muchos amigos en las redes, pero saben quiénes son esos amigos? Ahí es cuando los adultos intentan aprovecharse de los niños y niñas. Si les piden algo, antes que nada avísenle a sus padres o a un mayor y traten de no borrar nada para que después la Justicia pueda investigar con esas pruebas”, les sugirió Montes.
