En un contexto de constantes aumentos en los precios de los combustibles, Roberto Martínez, vicepresidente de la Cámara de Expendedores de Combustibles, Lubricantes y Afines (CECLA) de la provincia de La Pampa, compartió su perspectiva sobre la situación actual del sector. Martínez detalló los desafíos que enfrentan las estaciones de servicio debido a las fluctuaciones en los precios y la baja en la demanda de combustibles y lubricantes.
Martínez, en diálogo con INFOPICO RADIO 99.9, explicó que los aumentos de precios son una realidad mensual, impulsada principalmente por los precios, impuestos y el impacto de la inflación. Según Martínez, el último aumento registrado a partir de este 1 de septiembre fue de un 4% en promedio para las naftas, que reiteró que “siempre son acompañados por un reacomodamiento de impuestos y lógicamente otro poquito que las petroleras reacomodan su precio por la inflación”, comentó.
La caída de la demanda
El vicepresidente de CECLA destacó la preocupación constante de los expendedores debido a la disminución en las ventas de combustibles y reveló que “no recuperamos las ventas tradicionales de años anteriores“, que agregó que los consumidores han cambiado sus hábitos de consumo, reduciendo el uso del automóvil o pasando de utilizar naftas Premium a Súper, y ahora están limitando incluso este consumo.
La baja demanda no solo afecta a los combustibles, sino también a otros productos relacionados como aceites y lubricantes. “Todo va de la mano, si el tractor está parado o el auto está parado, no consume aceite, no hay cambio de aceite, no hay kilómetro realizado”, explicó Martínez, resaltando la interdependencia entre el uso de combustibles y la venta de otros productos en las estaciones de servicio.
Martínez mencionó que la demanda de combustibles en La Pampa está estrechamente vinculada al sector agrícola, que actualmente atraviesa un período de baja actividad: “agosto y septiembre son meses en los que el agro, que es el que más demanda combustible, está prácticamente parado, entonces la demanda está muy retraída”, dijo. Sin embargo, expresó cierta esperanza de que la situación mejore: “Siempre tenemos la expectativa de que esto vaya mejorando de a poquito“.
A pesar de la caída en las ventas, Martínez señaló que las estaciones de servicio han logrado evitar despidos, aunque han tenido que realizar ajustes en los horarios y reubicar al personal: “no hemos tenido despidos, pero si reacomodamiento de personal, porque hay estaciones de servicio, generalmente de pueblo, que ya no están abiertas las 24 horas”, detalló.
En cuanto al abastecimiento, Martínez indicó que, aunque algunas petroleras aún tienen restricciones, la situación se ha normalizado y no hay problemas significativos en la producción de combustibles. “no se paró la compra internacional, lo que se importaba”, añadió.
Martínez enfatizó que la Cámara de Expendedores mantiene reuniones permanentes con las petroleras para buscar soluciones y ajustar estrategias frente a las circunstancias actuales y ssostuvo que “estamos preocupados, permanentemente reuniéndonos con ellos y buscando alternativas”, comentó, destacando la necesidad de una mayor colaboración entre las estaciones de servicio y las petroleras.
A pesar de los desafíos, el sector mantiene cierta estabilidad. “No se han cerrado estaciones de servicio, pero tampoco hay aperturas como en otros años“, concluyó Martínez, reflejando un escenario de espera y adaptación ante la incertidumbre económica.
