La reciente reforma de la Ley de Alquileres en Argentina, aprobada por la Cámara de Diputados de la Nación, ha provocado reacciones diversas entre los inquilinos y el sector inmobiliario. Mientras la nueva legislación es vista con esperanza por algunos sectores de inquilinos debido a la introducción de medidas que buscan aliviar la carga de los ajustes en la renta, los empresarios inmobiliarios muestran su preocupación y critican algunas de las modificaciones, advirtiendo posibles complicaciones en el mercado de alquileres.
Principales Cambios en la Normativa
Los cambios más notables se centran en la prohibición de alquileres en dólares, imponiendo que los precios se expresen exclusivamente en pesos argentinos, y en la actualización de las rentas, que se efectuará cada seis meses en lugar del ajuste anual previo. Este ajuste se realizará mediante el coeficiente “Casa Propia”, implementado por el Ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat, el cual toma en consideración indicadores como la variación salarial y la inflación.
Un Nuevo Sistema de Ajuste de Precios
Este coeficiente “Casa Propia” refleja en un 90% el promedio de la variación salarial y se basa también en la inflación del último año. Para calcular el nuevo valor del alquiler, los inquilinos deberán utilizar los últimos seis valores del índice, que será accesible a través de la web del Ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat. Un ejemplo ilustrativo indica que un alquiler de $100.000 en mayo de 2023 podría aumentar a $139.000 en noviembre del mismo año.
Comparativamente, el nuevo sistema de ajuste podría resultar más ventajoso para los inquilinos a partir del segundo año de contrato, especialmente si se lo compara con el sistema anterior, denominado “Índice de Contrato de Locación” (ICL). La efectividad dependerá de la variación de los precios y salarios en el futuro.
Reacciones del Sector Inmobiliario
Empresarios del sector, como Enrique Abatti, presidente de la Cámara de Propietarios de la República Argentina, han manifestado su descontento, señalando que la reforma podría complicar la aplicación de los ajustes al requerir la consulta de dos fuentes para su cálculo y distanciarse de la realidad inflacionaria. Además, Abatti y otras entidades sugieren que esta reforma podría desmotivar la oferta de viviendas en alquiler y empeorar la actual crisis en el sector.
También se ha señalado que mantener contratos de tres años y con esta nueva normativa podría incidir en la retirada de unidades del mercado y en una elevación de los precios, perjudicando, paradójicamente, a los inquilinos.
Próximos Pasos
Se espera que la nueva norma sea promulgada y entre en vigor en las próximas semanas, ya sea este mes o a principios de noviembre. En caso de demoras, el Artículo 80 de la Constitución Nacional establece que la ley quedará automáticamente promulgada si transcurren 10 días hábiles desde su envío al Ejecutivo sin una promulgación expresa.
La reforma de la Ley de Alquileres busca un equilibrio en los ajustes de renta y proteger a los inquilinos, pero genera preocupación en el sector inmobiliario, que advierte sobre posibles impactos negativos en la oferta y los precios de las viviendas para alquilar.
fuente: Infobae
